Blava..., azul o azulada en valenciano, una tienda de regalos con sabor antiguo, con sabor vintage, con aire de tiempos pasados que abre sus puertas a la altura del número 41 de la calle Navarro Cabanes deValencia, a dos pasos de las nuevas oficinas de la Conselleria valenciana y a mitad de camino entre mi taller de esqueletaje y la tapiceria de los hermanos Gomez.
Muchas de las funcionarias y funcionarios de las consellerias visitan la tienda durante el tiempo del almuerzo, también vecinos del barrio que lo han visto despertar con la remodelación de la antigua carcel Modelo de Valencia, incluso llega a ser facil encontrar a algun conocido observando desde el escaparate o recorriendo los estantes buscando algun detalle que regalar o que se llevarse a su nuevo hogar, imagino que algo así estaría pensando mi apreciado Featherston.
- ¡¡ Vaya...¡¡¡, tu por aquí -exclamé al verlo asomado al escaparate de Alicia.
Aterciopelado y lleno de aguas y matices, contemplaba esos objetos que le recordaban a su propia época, a la decada de los cincuenta en un continentre muy lejano, a su Australia natal.
- Pues aquí, curioseando..,a ver si encuentro algo que llevarme como presente.
- Venga, pues vamos dentro que hay cosillas que ver.
- Por cierto..., ¿te importa que tire unas fotos...?, así, mientras curioseas....
- Me extraña que no lo estes haciendo ya.
- Como me conocessssss........
-Bueno..., ¿y ya has encontrado algo que te guste...?.
- Si..., ya lo tengo claro -respondió Featherston.